La luz dura que incide sobre la escultura ha puesto de manifiesto las texturas del metal, resaltando todas y cada una de las arrugas y pliegues. Un abrazo,
Un rostro anónimo, como muchos otros, pero son desconocidos para algunos, detrás hay unas vidas, unos seres humanos, muchas veces olvidados injustamente.
La luz dura que incide sobre la escultura ha puesto de manifiesto las texturas del metal, resaltando todas y cada una de las arrugas y pliegues. Un abrazo,
ResponderEliminarMe hace daño este rostro sin nombre.
ResponderEliminarSi que tiene nombre: Impresionante!!!
ResponderEliminarHola, César!!!...he estado admirando tus últimos trabajos...y me lo he pasado en grande, enhorabuena!!!
Un gran abrazo y muchas gracias, amigo!!! ;)
Un rostro anónimo, como muchos otros, pero son desconocidos para algunos, detrás hay unas vidas, unos seres humanos, muchas veces olvidados injustamente.
ResponderEliminarUna foto impactante, César.
Abrazos.
Que gran fotografía César, cuanto me gusta.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ramón